PROSAS DE ABRIL PARA MI
HERMANO
Brownsville Tex.,
Las velas tensas son tus
manos, el vapor tu mente.
Listo siempre para surcar y
reconocer el universo;
Desconcertante, profundo e infinitamente
extenso.
Fueron aquí, tus deseos
simples, tu razón
Y emoción profundas, tus metas
completas
Y tus angustias metafísicas
nunca resueltas.
¿Quien se dio cuenta? El
mástil de tu corazón.
Haces de energía radiante,
pulsante, verdadera
De neuronas y dendritas
explotando como moños
En el Cielo obscuro de tu
temprana primavera,
Noche fatal en el principio de
Tu otoño.
Afortunada partida para ti,
que por fin marchaste.
Viaje anunciado, esperado
iniciado y sin regreso.
De propósito complejo,
fraguado y por eso;
Desconocido motivo por el que,
sin timón, zarpaste.
Estelas de dolor quedaron en
un mar salado
Incomprensible para el
espíritu mellado,
Inconsolado, confuso entre la
paz y el llanto
De alguno que alguna vez, te
quiso tanto.
Y como mariposa, de luciérnaga
mutada
Por químicos efectos,
entendiste tu, mirada
Hacia el galáxico universo de
leptones
e iniciaste el sueño, entre
halos de fotones.
Con alas, velas o tal vez brazos
sobrehumanos
Emprendiste el viaje,
abrazando el cielo
Dejando estrellas y señales en
tu vuelo...
Para hallarnos luego, extraño
amigo, amado hermano.